sábado, 15 de febrero de 2014

LA TEMPESTAD de GIORGIONE.


Antes de empezar a hablar sobre la propia pintura, deberíamos conocer a su autor, Giorgo Barbarelli de Castelfranco, más conocido como Giorgione. Fue un personaje enigmático del cual se sabe muy poco, y todo lo que conocemos de él es gracias a la biografía realizada por Vasari a la que tituló “Vidas”. Nació en el año 1477 y procedía de una humilde familia de terra ferma. En su época gozó también de reconocimiento como músico. Perteneció a la Escuela de Venecia donde trabajó con Giovanni Bellini, del que fue discípulo. No firmó muchas de sus obras, por lo que algunas de ellas han sido atribuidas a otros autores posteriores como Tiziano, y se sabe que han sido incluso falsificadas. En total se conocen una decena de obras firmadas por él como Los tres filósofos, Venus dormida o Retrato de una vieja, en las que se observa la influencia de su contemporáneo Leonardo Da Vinci. Murió en el año 1511 al contraer la peste de manera repentina, con tan solo 34 años.

Situando a este autor en el contexto de la República de Venecia, por entonces, ésta basaba su riqueza en las transacciones comerciales que realizaba con Oriente, recibiendo así influencias del arte bizantino de finales de la Edad Media. También la República se relacionaba económicamente con el Mediterráneo y con Europa, propiciando un mercado de lujo y la aparición de luchas por el poder en el seno de las propias instituciones.

Dejando a un lado el contexto y el autor, nos centramos ya en la obra. La tempestad, al igual que Giorgone, es un cuadro muy enigmático y misterioso del que ni siquiera se conoce el tema con exactitud. Es una pintura mueble, al óleo, sobre lienzo, de tamaño muy pequeño, pues mide tan solo 80 cm de altura, y que actualmente se encuentra en la Galería de la Academia de Venecia. Fue realizada hacia 1509, y en ella podemos encontrar todas las características propias del Cinquecento de la Escuela Veneciana. Se puede observar una mujer semidesnuda y sentada, amamantando a un niño en la orilla de un río, y otra figura, de pie, al otro lado del cuadro con apariencia de soldado (o pastor) y sosteniendo una vara. Al fondo, se ve una ciudad y un cielo tormentoso que acecha a los personajes. La oscuridad se está acercando sobre ellos pero éstos siguen ajenos a la llegada de la tempestad, lo que da el título a la obra, ya que ni éste es conocido con exactitud. No hay inquietud en la escena. Ambas figuras viven sus propias emociones en la naturaleza y en una atmósfera de sueño, donde no hay lugar para el drama. La falta de reacción provoca la sensación de intemporalidad que hace que nos introduzcamos en el cuadro.

Esto es lo que se observa a primera vista, pero, las interpretaciones, como ya decía Vasari, contemporáneo de Giorgione, han sido muy variadas desde la creación de la obra. Para algunos la escena representa un tema religioso identificando la Huida de Egipto, o Adán, Eva y Caín expulsados del Paraíso. Para otros es un tema mitológico relacionado con la infancia de Paris, incluso con el “Sueño de Polífolo”. Aún así no hay nada claro.

En la pintura hay varios elementos que le confieren misterio. Para empezar, la mujer mira desafiante al espectador sin ningún reparo, mientras que el personaje masculino gira su cabeza hacia la escena como si quisiera presentarla. Ambos personajes no están conectados, se representan aislados pero formando parte del mismo escenario. Otro elemento enigmático es la columna, que podría simbolizar fortaleza, pero al estar rota, también es símbolo de muerte. Todo el cuadro es puro simbolismo.

La tempestad, además, puede considerarse el primer paisaje de la Historia del Arte, ya que, por primera vez, la naturaleza no es un simple telón de fondo y tampoco el campo de acción de la historia o del mito, sino que asume el nivel del protagonismo junto con el de la propia historia. La naturaleza y la historia van unidas, y las personas y las cosas participan en un mismo sentimiento siendo representadas en un mismo plano de igualdad. Las figuras tienen la misma importancia que el paisaje, pues sin ellas, éste se oscurecería y perdería significado.

La tempestad, como todas las obras de Giorgione, fue realizada sin dibujos ni bocetos previos, aplicando directamente el color, lo que confiere a la obra mucha espontaneidad. Esto se sabe porque las radiografías realizadas permitieron comprobar que en un principio Giorgone, en lugar de la figura masculina, había pintado una muchacha desnuda con los pies en el río. Si hablamos de la perspectiva, usó la perspectiva aérea y la técnica del sfumato, lo cual consiste en difuminar progresivamente las figuras conforme se alejan del espectador, siendo las más cercanas realizadas con más detalle.Así se consigue la profundidad, la cual también la producen el escorzo que presenta el hombre y la posición ladeada de la mujer.

En la obra podemos encontrar diferentes líneas de composición. Teniendo en cuenta las figuras, el grupo de la mujer con el niño forma un triángulo, y la figura masculina es totalmente vertical, lo cual acentúa la vara que sostiene. Otras líneas que dan verticalidad son los árboles de los laterales. El punto horizontal se ve en el puente y en el muro sobre el que se apoya la columna.

El color y la luz son muy importantes en la pintura de la Escuela de Venecia, y en este cuadro son los que consiguen la unidad. La obra presenta una gran riqueza cromática, con la combinación de muchas tonalidades diferentes que aportan la magia al paisaje. Predominan los ocres en los edificios, el rayo y el cuerpo de la mujer, así como los rojos y anaranjados de la vestimenta del supuesto soldado, siendo éstos los colores cálidos. Los verdes de la vegetación y en general del paisaje, y el azul verdoso del cielo son los colores fríos predominantes. Clasificándolos según primarios y secundarios, tendríamos el rojo y el azul como primarios, y el resto como secundarios. La luz del cuadro es proporcionada por el rayo y los destellos de un día nublado, lo que provoca el juego de sombras. También el color blanco del paño, de la columna y de la camisa, así como los ocres, aportan luminosidad.

Para concluir, podemos comentar la trascendencia del autor en épocas y corrientes pictóricas posteriores, como en su discípulo Tiziano, o varios siglos después, en el propio Manet. De su obra, cabe destacar su manera de innovar en el simbolismo, en el cromatismo, y en la composición. Pese a todo esto su figura no ha tenido la relevancia de la que gozan otros genios de su época como Da Vinci y Miguel Ángel. Así pues, La tempestad ha sido comparada con distintas pinturas como es Desayuno en la hierba de Manet, o incluso con la Olimpia de este mismo autor.

 
LA CAPILLA SIXTINA

La capilla Sixtina es una de las obras más importantes del Renacimiento. Está situada en la ciudad del Vaticano (Roma) y fue construida por el arquitecto Giovanni de’Dolci entre el 1477 y 1480; por lo tanto pertenece a finales del Cuattrocento.
Le debe su nombre al papa Sixto IV, quien mandó reestructurar la antigua Capilla Magna. Se trata de la capilla más famosa del Vaticano, situada a la derecha de la Basílica de San Pedro, y su fama se debe principalmente a los magníficos frescos que hay en su interior.
Originalmente su función era la de capilla Palatina (capilla de la fortaleza vaticana), mientras que actualmente cumple la función de sede del cónclave.
Para hacernos idea de la grandiosidad de la obra y la importancia que tuvo Miguel Ángel en el renacimiento; en el momento de la elección del nuevo papa se reúnen todos los cardenales en la capilla Sixtina y se cierran las puertas quedándose ellos dentro y se suele decir una frase en latín “extra omnes” que quiere decir “fuera hombres”, dando a entender que dentro de la capilla solo se quedan los cardenales y Miguel Ángel.

A principios del siglo XVI Roma sucede a Florencia como capital del arte, convirtiéndose así en el centro de la cultura occidental. Es la época de los grandes genios como Miguel Ángel, Rafael, Leonardo, etc. Se empieza a juzgar el arte y la cultura como elemento de prestigio.
También es época de desarrollo del comercio,  reformas religiosas y descubrimientos geográficos.
En general, es un periodo de gran evolución y desarrollo.

En el año 1508, el papa Julio II encargó a Miguel Ángel los famosos frescos de la bóveda de la Capilla Sixtina, y este lo aceptó a regañadientes ya que él se consideraba a sí mismo escultor, no pintor; por lo que sus pinturas dan la impresión de esculturas pintadas.

Miguel Ángel Bounarroti fue un escultor, pintor y arquitecto italiano del siglo XV y XVI  que nació en 1475 en Caprese y murió en 1564 cuyas obras más conocidas son “El David”, la cúpula de San Pedro del Vaticano y las pinturas de la Capilla Sixtina.
Comenzó su formación como pintor a los 12 años y un año más tarde descubriría su afán por la escultura. Es considerado uno de los grandes genios del Renacimiento.

La Capilla Sixtina es un edificio de planta rectangular y grandes dimensiones, cuyo material de construcción es el ladrillo.
Se exterior carece de cualquier tipo de decoración, como es común en muchas iglesias del Renacimiento en Italia, y es difícil observarlo, ya que solo se puede ver desde los vanos de alrededor o los patios. No cuenta con una fachada principal ni con entradas exteriores; solo se puede acceder a través del interior del Palacio Apostólico.
La capilla cuenta con unos grandes contrafuertes para reforzar las paredes exteriores, necesarios por el agrietamiento e hundimiento de la mampostería.

Las dimensiones del edificio son aproximadamente de 40,9 m de largo por 13,4 m de ancho, y el techo abovedado se encuentra a 20,7 m de altura. Se podría hablar de medidas prácticamente exactas, ya que si dividimos por tres la longitud del edificio obtenemos el ancho y si la dividimos por dos la altura.
La capilla cuenta con seis vanos a cada uno de los lados y dos en cada extremo.
El techo es una bóveda de cañón, que cuenta con varios lunetos que hacen que parezca disminuir la altura de esta. Esta bóveda esta cortada en sentido transversal (de un lado al otro) por unas pequeñas bóvedas situadas sobre los vanos, quedando dividido el nivel más bajo en grandes pechinas (triángulos curvilíneos que forman el anillo de la cúpula) elevadas sobre unas pilastras (columnas de sección cuadrangular), poco profundas, entre los vanos.

La capilla queda dividida en dos partes por la mampara de mármol realizada por Mino da  Fiesole, Andrea Bregno y Giovanni Dalmata, los cuales también realizaron el púlpito del coro.
En un principio, el espacio donde se encuentra el altar estaba reservado para los miembros de la Capilla Pontificia, mientras que el resto era para ciudadanos y peregrinos. Pero al aumentar los asistentes del papa esta mampara de mármol tuvo que ser desplazada, reduciendo así el espacio reservado para los fieles.
Actualmente esta mampara está coronada por una hilera de candelabros ornamentados.

Miguel Ángel, para las pinturas de la capilla Sixtina utiliza una técnica llamada “Buon Fresco” (el buen fresco) que esta basado en una reacción química llamada carbonatación. Se le va dando a la pared muchas capas de cal, la primera mezclada con arena y el resto con mayor concentración de cal para dejar la superficie lisa, una vez conseguido esto, y estando la pared húmeda, se aplican los colores que son absorbidos. Cuando la superficie se seca, se produce la carbonatación y los colores quedan integrados en la pared. Por eso, esta técnica no dejaba margen de error ya que solo se podía pintar cuando la superficie estaba aun húmeda. No se trata de pinturas móviles, si no que todos los frescos son pinturas murales.

Miguel Ángel decidió pintar las figuras de la capilla Sixtina desnudas completamente lo que pareció no gustar mucho al maestro de ceremonias, Biagio de Cesana, quien mandó a un discípulo que tapara con más ropas a los personajes, pero Miguel Ángel se vengó de él pintándolo en el infierno y desnudo.

Respecto a las pinturas se pueden destacar las nueve escenas del génesis representadas en la franja central de la bóveda de la capilla. Las impares están bordeadas por unos medallones sostenidos por figuras desnudas. Estos nueve frescos se pueden agrupar en torno a tres significados: los tres primeros se refieren a la creación del mundo, los tres siguientes a la creación del hombre y la mujer, y los tres últimos a la maldad del hombre y al castigo divino.

El fresco de la creación de Adán es uno de los episodios del génesis más famoso y el que se encuentra en el centro de toda la capilla. En este, Dios extiende su mano derecha hacia Adán para darle la vida, aparece rodeado de ángeles y su brazo izquierdo está alrededor de una figura femenina, interpretada como Eva, aunque aun no había sido creada.
El brazo izquierdo de Adán también esta extendido de la misma manera que el brazo derecho de Dios, aunque los dedos de ambos están separados por una mínima distancia y no se llegan a tocar. Adán representa lo terrenal ya que se encuentra en un triangulo de Tierra y Dios aparece flotando en el aire representando lo divino. Las manos son lo más expresivo de toda la composición y presenta unos colores vivos. Cabe destacar la terribilitá (energía, enfado) de los personajes, la anatomía voluminosa y musculosa de Adán y la perfección.

El fresco más grande de la capilla Sixtina es el Juicio final con 13.70 m de alto y 12.20 m de ancho y con 400 figuras representadas en él. La parte superior de la composición, más de la mitad de la pared, está ocupada por el mundo celestial presidido por Cristo en el centro de la escena mostrando un escorzo y movimiento, levantando el brazo derecho en señal de impartir justicia. A su lado, la Virgen María, rodeadas ambas figuras por un conjunto de santos, apóstoles, patriarcas, mártires, vírgenes, etc.
En la parte intermediaria se encuentran, a la izquierda los que ascienden al cielo que no muestran ninguna profundidad, a la derecha los pecadores que caen al infierno y en el medio los ángeles trompeteros que tocan trompetas para despertar a los muertos.
En la zona inferior derecha se encuentra el traslado de los muertos en la barca de Caronte hacia el juez del infierno.
Los lunetos superiores muestran a los ángeles con los instrumentos de la Pasión, así como invocando la venganza.
El grupo central tiene una escala mayor que el superior y que los grupos laterales.
Predominan los colores primarios, sobre todo el rojo y el azul que se usa para todo el fondo.

Las paredes laterales de la capilla se dividen en cuatro partes según sus pinturas: la primera parte y la más alta esta formada por los lunetos donde se representa a los antepasados de Cristo con inscripciones en latín; en la segunda parte se representan a los pontífices expuestos por parejas a cada lado de las ventanas; la tercera parte se forma por seis cuadros a cada lado y dos cuadros en la pared del fondo, los de la izquierda del altar tratan la vida de Moisés y los derecha los de Jesucristo (entre los que se encuentra la última cena) y la última parte se trata de las cortinas que coinciden con cada cuadro de la franja anterior.

Se cree que Miguel Ángel escondió y camufló diferentes mensajes en los que se dejaba ver su crítica a la Iglesia católica en algunas de las pinturas de la capilla.
Se dice que incluso pintó imágenes homosexuales, así como señas obscenas por parte de los personajes. Algunos ejemplos son:
Un curioso personaje (Aminadab) realizando con sus manos la cornamenta satánica justo encima de la representación del papa, por lo que se pensaba que los cuernos iban dirigidos a él.
En el fresco más importante de la capilla, La Creación de Adán, se piensa que pintó lo que parece ser un cerebro, justo donde está Dios, dando a entender que Dios esta solo en la cabeza de los hombres.
Lo que nunca llegaremos a saber es hasta que punto Miguel Ángel hizo esto con verdadero intención o simplemente esto ha sido ideado más tarde.

La capilla Sixtina junto a sus frescos fue restaurada entre los años 1980 y 1984. Los restauradores usaron unos andamios sujetos a unos huecos en la pared, los mismo que había utilizado Miguel Ángel para sujetar su andamio y poder pintar la bóveda. En la restauración se dejaron sin limpiar pequeñas secciones para que se apreciara el contraste entre el estado de las pinturas antes y después de esta.


Para finalizar, una cita del antigua papa Juan Pablo II "Los frescos que aquí contemplamos nos introducen en el mundo de los contenidos de la Revelación. Las verdades de nuestra fe nos hablan desde cada lugar. De ellas, el genio humano ha sacado la inspiración empeñándose en revestirlas de formas de una belleza inigualable".

miércoles, 12 de febrero de 2014

PALACIO MEDICI-RICCARDI DE FLORENCIA

La familia Medici era una familia de banqueros y una de las familias más prestigiosas de Florencia. Cosme el Viejo (familiar Medici) encargo a Michelozzo que realizara el Palacio. Podría haber escogido a otros muchos autores como Brenelleschi, pero no lo eligió ya que tenía demasiada ornamentación en la parte externa de sus arquitecturas.
El palacio se realizo entre los años 1444 y 1460. Se encuentra en la Vía Cavour (antes llamada vía Larga) en Florencia. Frente a la iglesia de San Lorenzo.
Los Medici comenzaron a vivir en el palacio, en el año 1460 aproximadamente hasta que entre los años 1655 y 1659 lo vendieron a los Riccardi. Mas tarde en 1874 pasó a ser propiedad del Estado. Actualmente es la sede del consejo provincial.

En el urbanismo renacentista surge la necesidad de modificar la estructura urbana medieval para destacar los edificios singulares: torres, palacios, iglesias, siempre utilizando proporciones geométricas.
Para la construcción del palacio fue necesaria la demolición de veinte casas. Es un palacio civil de planta cuadrangular con un patio central.
Su fachada esta dividida en tres pisos horizontales, separados por cornisas.
-          En el primer piso, habían cinco arcos de medio punto que fueron sustituidos por ventanas. Tiene un almohadillado rústico que sobresale de manera desigual para dar esbeltez.
-          En segundo piso, encontramos vanos con arcos de medio punto con un almohadillado más ligero que no sobresalen.
-          En el tercer piso, tenemos vanos con arcos de medio punto y un muro liso. Por último, una gran cornisa volada sujeta con ménsulas.
-          Además, los Riccardi añadieron vanos al segundo y tercer piso.
El palacio da sensación de fortaleza.

El patio tenía una forma cuadrangular rodeado de columnas de orden compuesto y arcos de medio punto con un friso con medallones de escenas mitológicas.
En el centro está presente la escultura de Orfeo. Sus paredes están adornadas al estilo barroco. Desde el patio quedaba comunicado al jardín y también  las distintas habitaciones.

Otros palacios similares de Mchelozzo son el palacio de Carlos V en Granada, el palacio de Rucelli en Florencia.
En Aragón también encontramos palacios renacentistas como el Palacio de los Condes de Morata (Palacio de los Luna).


  

lunes, 10 de febrero de 2014

El nacimiento de Venus

EL NACIMIENTO DE VENUS

En el siglo XV se desarrolla el periodo del Quattrocento dentro del movimiento cultural del Renacimiento al que pertenece esta obra.

El autor fue Alessandro di Mariano Filipepi, más conocido como Sandro Botticelli que nació el 1 de marzo de 1445 en Florencia.
Fue discípulo de Fra Filippo Lippi, trabajó con el pintor y grabador Antonio del Pollaiuolo, con el que aprendió el dominio de la línea. Consiguió tener su propio taller y la mayor parte de su vida estuvo trabajando  para las grandes familias florentinas, sobre todo para los Medici, a los que les pintó diferentes retratos, entre los que está el Retrato de Giuliano de Medici.
Botticelli recibió la influencia del neoplatonismo cristiano que intentaba conciliar las ideas cristianas con las clásicas. A partir de aquí realizó obras como El nacimiento de Venus o La Primavera.
También realizó obras de tema religioso como La Madonna del Magnificat
En 1481 Botticelli fue llamado por el Papa Sixto IV para pintar frescos en las paredes de la Capilla Sixtina como Las pruebas de Moisés, El castigo de los rebeldes y La tentación de Cristo.
En la década de 1490 Botticelli sufrió una crisis religiosa  influenciado por el monje dominico Girolamo Savonarola y finalmente falleció el 17 de mayo de 1510 en Florencia y fue enterrado en el sepulcro familiar de la Iglesia de Ognissanti.

El nacimiento de Venus es una obra realizada entre 1482 y 1484, fue un encargo de Pier Francesco Medici para su hija.
Está realizada en temple sobre lienzo y sus medidas son de 172,5 cm por 278,5 cm.

El tema que se representa es mitológico. Venus, diosa del amor, nació de los genitales del dios Urano que fueron cortados por su hijo Crono y que más tarde fueron arrojados al mar. Por eso el título de la obra no es exacto, ya que lo que se representa en esta obra es la llegada de Venus sobre una concha, símbolo de fertilidad, empujada por los vientos que producen los dioses alados Céfiro y Cloris a la isla de Citerea (actualmente conocida como Chipre).

En el centro de la imagen está la figura de Venus, completamente desnuda ya que acaba de nacer. Su rostro es el retrato de Simonetta Vespucci que fue musa y modelo de otros pintores, además Botticelli también lo utilizó en otras obras. Sus ojos son claros, no miran hacia ningún lugar en particular, y su boca está cerrada. Venus aparece ocultando con una mano un pecho y con su largo cabello su zona genital. Se le representa en un elegante contraposto; además el autor realizó su pose tras haber estudiado una escultura de la colección Medici. Su piel es de color marfil, casi blanco que recuerda al mármol.
Aunque es de gran belleza también hay que destacar el tamaño antinatural de su cuello, la gran caída de sus hombros y la manera extraña en la que le cae el brazo izquierdo.
A la izquierda se encuentran unidos en un abrazo Céfiro, el Viento del Oeste e hijo de la Aurora, y Cloris, ninfa de la brisa, la cual fue raptada por Céfiro del jardín de las Hespérides y se convirtió en su consorte. Como Botticelli quería diferenciar los dos tipos de vientos de distinta fuerza los pintó como un hombre y una mujer, el primero con una piel más oscura porque produce un viento más fuerte, que impulsa a Venus, levanta su pelo y el manto rojo, y tiene alas porque vive en el cielo, y Cloris tiene una piel más clara porque produce un aire más suave, y así parece más delicada y frágil.
Junto a ellos aparece una lluvia de rosas, las cuales según la mitología se crearon al mismo tiempo que Venus, y son símbolo de amor aunque sus espinas recuerdan que el amor puede ser doloroso.
Y al otro lado de Venus está la Hora Primavera que es una de las tradicionales compañeras de la diosa y está en posición de movimiento porque intenta cubrir a Venus con un manto rojo decorado con flores. La Hora viste una túnica blanca con flores en la que hay una gran delicadeza en el tratamiento de los pliegues. También lleva un cinturón de rosas en la cintura y una guirnalda de mirto. Entre sus pies florece una anémona que indica la llegada de la primavera.
En cuanto al paisaje se distinguen unas montañas lejanas, una serie de árboles en los que aparece el color dorado, el mar verdoso con olas en forma de V y un cielo azul.

Por otro lado está la composición que es triangular, pero Venus no está en el centro porque aparece desplazada por el viento. Además también se aprecian otras formas como un triángulo que forma la Hora, la forma curvilínea de la diosa, la forma casi circular de la concha y las diagonales que forman tanto Céfiro y Cloris como la Hora.

Hay un uso de la perspectiva que se aprecia fundamentalmente por la diferencia de tamaño entre los elementos del fondo y los del principio, como por ejemplo las olas en forma de V que al final apenas se ven y en la orilla son mucho más claras y cambian de forma, también las zonas de tierra van disminuyendo. Otros elementos que ayudan a dar profundidad son la línea del horizonte o el escorzo de los pies de Venus. Pero hay que destacar que a Botticelli no le importaban los efectos de perspectiva.
Y en el dibujo utiliza una línea negra para trazar los contornos.

Los colores utilizados se pueden clasificar por una parte en fríos, en los que destacan el azul del cielo que es primario y como secundario el verde del mar. Y por otra parte están los cálidos que contrastan con los anteriores, en este grupo está el rojo del manto que es primario, el naranja del pelo de Venus que es secundario y como terciario el marrón de la túnica de Cloris o del pelo de Céfiro.
En cuanto a la luz hay que destacar que no es igual en todas partes del cuadro, porque el fondo está iluminado alrededor de Venus y la parte derecha es más oscura.

Además de ser un tema mitológico también hay que destacar la exaltación del hombre, en este caso de la mujer y otro de sus significados consiste en la correspondencia entre el mito del nacimiento de Venus desde el agua del mar y la idea cristiana del nacimiento del alma desde el agua del bautismo.

Y finalmente hay que señalar que las fuentes literarias de Botticelli fueron Las metamorfosis de Ovidio y Poliziano donde se dice:

Por los céfiros lascivos empujada

veríais la diosa que del mar salía

exprimiendo cabellera remojada

mientras otra mano el pecho la cubría.

Esta obra actualmente está muy bien conservada y se encuentra en la Galería Uffizi en Florencia.








La virgen de las rocas, 1486



La virgen de las rocas


La virgen de las rocas es una pintura realizada al óleo sobre tabla. Fue realizada por Leonardo da Vinci y terminada en 1486, por lo que pertenece al quattrocento italiano.
Actualmente la podemos encontrar en el museo del Louvre, en Francia.

Leonardo da Vinci (15 de Abril de 1452 – 2 de Mayo de 1519) nació en Vinci, dentro de los territorios de Florencia. Fue uno de los grandes maestros del renacimiento y es considerado un “homo universalis” por su polifacética actividad como ingeniero, arquitecto, escultor, músico, escritor, diseñador, dibujante, filósofo, científico y excelente pintor.
Leonardo demostró ser un adelantado a su época y alguien con capacidades sorprendentes. Podemos destacar su capacidad para realizar escritura especular (escribir al revés), escribía así en sus anotaciones para uso propio, se cree que lo hacia para no manchar con la tinta porque era zurdo y para que los demás no pudieran leerlo. Otra de sus capacidades era su ingenio para crear distintas maquinas y artilugios, sobretodo voladoras (ornitóptero), y por último sus avanzadas investigaciones del cuerpo humano que realizaba mediante autopsias clandestinas, hizo grandes avances en el estudio de la circulación sanguínea y en el funcionamiento del ojo.

En 1460 Leonardo se trasladó a Florencia, donde comenzó a formarse en el taller de Andrea Verrocchio, en el que recibió una exquisita educación artística e intelectual.

En 1482 se traslada a Milán donde entra al servicio de Ludovico Sforza (duque de Milán). Leonardo trabajo para el duque en calidad de arquitecto y como ingeniero en “tiempos de guerra” construyendo artilugios e inventos bélicos, y el “tiempos de paz” como constructor de edificios, escultor y pintor.
Durante los años milaneses Leonardo mantuvo su propio taller, a esta etapa pertenecen obras como “La ultima cena”, “La belle ferronnière” y “La virgen de las rocas”.

En 1501 regresa a Florencia donde pinta varios retratos, el más destacado es “La Gioconda”.
Sus últimos años los paso junto al rey Francisco I en Francia, donde murió en 1519.

La virgen de las rocas:

Nos encontramos ante un cuadro de temática religiosa, representa una escena de los evangelios apócrifos según los cuales el arcángel Uriel se encarga del cuidado de Juan Bautista, a quien siendo muy pequeño salva de la masacre de bebés ordenada por Herodes. EL cuadro nos muestra un encuentro entre Juan bautista niño y el arcángel Uriel con Maria y el niño Jesús en una cueva camino de Egipto.

La obra esta formada por una composición piramidal y centrada, siendo el vértice superior de esta la cabeza de María.
La Virgen María es la figura más grande del cuadro, con su mano derecha acoge a san Juan Bautista, primo de Jesús, y con la mano izquierda levantada sobre la cabeza de su hijo divino, con un perfecto escorzo.
San Juan se encuentra arrodillado y en actitud de adoración extendiendo sus manos hacia el niño Jesús, el cual se encuentra en actitud de bendecir. Ambos están desnudos simbolizando la pureza. Detrás de Jesús se encuentra el arcángel Uriel que mira con una leve sonrisa al espectador mientras señala a Juan bautista.

Leonardo dota al cuadro de atmósfera mediante el sfumato, técnica con la que se consiguen difuminar los contornos de las figuras para crear la ilusión de existencia de aire entre ellas. Este efecto vaporoso se obtiene mediante la superposición de varias capas de pintura extremadamente delicadas.
Podemos apreciar el sfumato en el contorno de la virgen, el cual se mezcla con el paisaje.

En el fondo de la pintura se aprecia la perspectiva aérea, con la que consigue la profundidad. Para ello utiliza dos técnicas. Por un lado, alterna la zona iluminada de las figuras con la oscura de las rocas y la iluminación de nuevo a través de las rocas. Además, frente al detalle con que realiza la parte más cercana al espectador, el fondo, especie de lago o neblina que se aprecia a través de las rocas, queda difuminado y menos detallado.

Hay dos focos de luz en el cuadro: uno artificial que ilumina a las figuras de la parte delantera y otro de luz natural que entra a través de las cavidades rocosas del fondo.

En cuanto a los colores, los más utilizados son el negro, el marrón, el azul y el color carne. En el primer plano dominan los verdes; en el segundo, destaca el rojo de las ropas de Uriel y los amarillos; al fondo los tonos fríos. 

La obra en su conjunto transmite una imagen en reposo e idealizada.
Tiene multitud de interpretaciones, pero la mas comentada es la que dice que Leonardo trata de contarnos a través de los gestos de Uriel que el verdadero propulsor del cristianismo fue en realidad San Juan Bautista, y esto nos lo intenta transmitir a su vez bajo el velo transparente creado por el sfumato con el que aumenta el misterio.

Esta obra fue encargada a Da Vinci para decorar el altar mayor de la iglesia milanesa de San Francisco el Grande, pero la obra no satisfizo a los frailes de la orden de San Francisco. No se sabe con exactitud el motivo, pero se cree que fue porque no llegaron a un acuerdo con la cantidad que debían pagar a Leonardo o porque les pareció que en el cuadro era confusa la distinción entre Jesús y Juan porque este se hallaba junto a la virgen y porque el gesto de señalar obligaba a prestar mas atención a Juan.

Se cree que Leonardo vendió el cuadro a un particular y que después realizo un segundo cuadro con ayuda de otro pintor, fue esta segunda versión con algunos cambios con respecto a la primera la que se entrego a la orden de San Francisco.

San Pietro in Montorio !! :D

El autor de esta obra es Donato Bramante, nació en torno a 1444 en Fermignano y murió en Roma en 1514. Destacó como pintor aunque sobre todo destacó como arquitecto. Su arquitectura se caracteriza por la serenidad y por el uso de la planta central cubierta con una cúpula .Durante su estancia en Roma se aleja del estilo ornamental y se acentúa su gusto por las formas simples. De su etapa romana destacan obras como: La Basílica de San Pedro y Los Patios de los Palacios del Vaticano.

Contexto Histórico:
Esta obra fue encargada por los Reyes Católicos para conmemorar la Toma de Granada en 1492. Para ello deciden levantar en la ciudad un templete a la memoria de San Pedro, justo en el lugar donde fue ejecutado.

Socialmente, los artistas cobran mayor importancia por su arte y porque se aprecia más su capacidad intelectual.
Respecto a la cultura, la Iglesia  sigue teniendo un papel importante en la sociedad y a la vez, se desarrollara la filosofía neoplatónica que fomenta el antropocentrismo característico de esta época y el aprecio por los números, la proporción y la armonía. También surge el movimiento humanista, difundido gracias a las Universidades y la invención de la imprenta por parte de Gutenberg. En este periodo también hay una Reforma protestante que rompe con la unidad cristiana. La Iglesia ante esto inicia la contrarreforma.
Dentro del renacimiento hay que diferenciar 2 etapas: El Quattrocento , siglo XV , con el centro en Florencia, es la época en la que aparece la figura del artista por lo que desaparecen definitivamente los anónimos, también hay  una evolución sobre todo  en las técnicas de pintura(la perspectiva) , en general este arte es de líneas más puras que  el Gótico, siendo de menor tamaño y simplicidad. El Cinquecento, siglo XVI, con su centro en Roma ,  se caracteriza por la impresión de la monumentalidad. Los pintores tienen el dominio de las técnicas y hacen obras de elevada calidad que reflejan un sentido de belleza y nobleza.

Historia de SAN PEDRO:
Roma, hacia el año 67 d.C. Pedro, uno de los discípulos de Jesús, ha estado en la ciudad imperial tratando de difundir los mensajes de su maestro. Pero corren malos tiempos para la recién creada secta judía de los cristianos: el emperador Nerón los acusa, entre otras cosas, del incendio de la ciudad y desata una persecución contra ellos. Así que Pedro decide abandonar Roma y ponerse a salvo pero, en las afueras de la urbe, tiene un encuentro milagroso con Jesús y decide volver sobre sus pasos.
Las consecuencias de este hecho son bien conocidas: poco tiempo después, el apóstol es detenido y, finalmente, crucificado cabeza abajo. Pasa a ser ahora San Pedro y a tener la consideración de primer Papa de Roma, de acuerdo con la frase de Jesús: "Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi iglesia".

Tema:
San Pietro in Montorio conmemora el lugar donde San Pedro sufrió el martirio, es una obra que busca la armonía y el orden clásico del Renacimiento de  principios del Cinquecento.
Material:
La obra fue construida en el año 1502, utilizando como material la piedra, supuestamente granito para el fuste de las columnas y el mármol para el resto del edificio. En cuanto a la cúpula está cubierta por un revestimiento metálico, que supuestamente es plomo.
Comentario técnico:

Es un templo circular, de planta centrada, levantado sobre un podio de 3 peldaños que representa las 3virtudes teologales: la fe , la esperanza y la caridad con una columnata exterior de orden toscano que envuelve la cella y sostiene un entablamento dórico que soporta a su vez una balaustrada. El templete está cubierto por una cúpula (que simboliza la Iglesia Triunfante) de media naranja coronada por un acabado a modo de linterna. En cuanto a su forma, podemos observar que es cilíndrico ya que las columnas, el pórtico,  la balaustrada, la cella, el tambor y la cúpula tienen una forma cilíndrica.
En los muros exteriores coloca hornacinas aveneradas, que se alternan con vanos adintelados.

Se pueden apreciar algunas diferencias entre el orden dórico de este templete y el dórico original. En las diferencias cabe destacar: La presencia de la base, que en el arte griego no existía, la ligereza de las proporciones ya que se emplea un módulo esbelto,  que es proprio del jónico o del corintio y los fustes lisos  sin estrías.
Al templo se accede por cuatro puertas, como si nos encontrásemos en una ciudad romana y en el interior, debajo del altar mayor está la cripta, donde supuestamente estaba clavada la cruz de San Pedro. Esta cripta simboliza el martirio del apóstol.
El templete, cuyo friso está decorado con triglifos y metopas, tiene en total 48 metopas en las que hay como elemento decorativo los instrumentos del martirio de San Pedro, con los objetos de la liturgia cristiana.
En la primera mitad del siglo XVII, el templete sufrió una serie de reformas de consideración, entre las cuales destacan las que se realizaron en el año 1628 bajo el pontificado de Urbano III y durante el reinado de Felipe IV. La cripta fue renovada en su totalidad y se le añadieron unas escaleras de acceso por los laterales, también se cambió el coronamiento en forma de candelabro, que fue diseñado por Bramante por otro, que sería el actual , esto se hizo a causa de que el original estaba muy deteriorado.
En el siglo XIX se sustituyó la cubierta original de teja  por el actual revestimiento de plomo, en los grabados antiguos se puede ver que las nervaduras o costillas formaban parte del plan original.

Es importante por ser el primer monumento de la arquitectura renacentista italiana del Cinquecento caracterizada por la ausencia de toda decoración innecesaria;y por su influencia en otras obras como la Cúpula de San Pedro de Roma, por ejemplo.


























Las Piedades del Vaticano !!


El autor de esta obra es Miguel Ángel Buonaroti, nació en 1475 en Caprese y murió en Roma en 1564.Fue una de las grandes figuras del Renacimiento italiano del siglo XVI. Tenía un carácter independiente y era muy persistente en sus esfuerzos. En cuanto a su personalidad podemos observar que siempre lucha por alcanzar la perfección. Teniendo 24 años realizó el grupo escultórico denominado “LA PIEDAD” aunque durante toda su carrera, ademas de la escultura también desarrolló la pintura y la arquitectura alcanzando un gran éxito en cada una de ellas.
Algunas obras pictóricas de este autor serían: El tormento de San Antonio, Santo Entierro y Crucifixión. En la arquitectura podemos destacar obras como: La fachada de San Lorenzo y  El Palacio Farnese. Y por último en escultura podemos nombrar algunas obras importantes como: El David, El Moisés.
Centrándonos en el grupo escultórico que nos ocupa, podemos mencionar que está esculpido en un bloque de mármol blanco que el mismo Miguel Ángel escogió de los Alpes Apuanos de la Toscana. La obra fue encargada por el cardenal de san Dionisio Jean Bilhères de Lagraulas o de Villiers, embajador de Francia  ante la Santa Sede, el contrato entre el artista y el cliente se firmó en 1498 en éste se decidía que la obra debía estar terminada antes de 1 año y así fue. Dos días antes del vencimiento del contrato, la obra estaba acabada y fue ubicada en la Capilla de Santa Pentronila del Vaticano sobre la tumba del propio cardenal. En 1749 la obra fue trasladada a la Basílica de San Pedro.

Tema:
En cuanto al tema de esta obra, Miguel Ángel esculpe una Virgen serena, joven y pura, eternamente virgen con un Cristo en sus brazos que parece estar dormido, sin mostrar ningún indicio de haber sufrido ningún martirio, es decir, el dramatismo que se refleja en el gótico con la sangre de Cristo, aquí no se percibe.
Comentario técnico :
Una de las cosas más llamativas es la técnica escultórica que Miguel Ángel usaba. Según él , la propia Naturaleza de la escultura estaba en el interior del bloque de piedra, por lo que él simplemente lo que hacia era esculpir para sacar a la luz la  escultura. “arte de sacar y no añadir”

Material :
Empleo un bloque de mármol , ya que el mármol blanco es un material noble y adecuado para extraer formas humanas.
Color :
Respecto al color es inexistente y nunca fue policromada.
El Dolor:
Miguel Ángel nos presenta como anteriormente hemos explicado, la Virgen sujetando el cuerpo muerto de su hijo , sin embargo no hay muestra de dolor. Por eso , la idea del retrato es idealizada y no un retrato realista de dolor. Aunque mirando minuciosamente cada detalle se puede observar la herida del costado y los estigmas de la pasión en manos y pies.
Composición:
Se engloba en un triángulo equilátero , que le da estabilidad con suaves movimientos(paños , cuerpo o mano de Cristo) hacia la derecha que es contrapesado por la suave inclinación de la cabeza de la Virgen, desde la cabeza de la Virgen hasta la base más ancha del conjunto.Todo ello permite un equilibrio y tranquilidad.

Volumen:
Se consigue mediante los paños bajos que dan una mayor estabilidad visual y siendo mucho más suave en los cuerpos y en los paños superiores.
Calidad y texturas de las superficies:
La textura es tersa y dura y el acabado y pulido y al contrario la base de tierra es áspera.El delicado pulido refuerza el sentido de belleza ideal que se buscaba en el renacimiento. En cuanto al tratamiento dado a las telas en la parte inferior se observan que son toscas al contrario de la suavidad que presenta la camisa , esto nos revela un gran interés por las texturas.

La perspectiva:
La  perspectiva de la obra de un punto de vista frontal aunque exista una sensación tridimensional, es decir al ser una escultura independiente respecto al entorno , de bulto redondo, se puede observar desde cualquier ángulo.

Movimiento:
La imagen presenta estabilidad y reposo , como se observa es una figura sedente.Solo destaca el desequilibrio del cuerpo del hijo sobre sus brazos.

Técnica sfumato:
Esta técnica fue muy empleada en el Renacimiento , sobre todo en pintura. Se aprecia en la forma de representar los músculos que están difuminados en la superficie marmórea, a pesar del detallismo de tendones y su derivación filial.
Destaca especialmente 2 rasgos:
Por una parte el perfecto conocimiento de la anatomía que se observa en el desnudo de Cristo , las venas.
Por otro lado, la figura de la Virgen (si la pusiéramos en pie) resultaría de un tamaño enorme. La razón de esto no es otra cosa que una pura corrección óptica que le permite al escultor dar un mayor apoyo al Cristo(estabilidad y armonía) del que siempre se había carecido en el gótico.Este menos tamaño de Cristo acentúa la unión entre la madre y el hijo.
Finalmente , habría que destacar que es la única escultura firmada por el autor y esto se debe a la desconfianza de los críticos en cuanto a la autoria de la obra debido a su perfección , en relación con la temprana edad del autor,tan solo 24 años. Esta grabación se encuentra en la cinta que atraviesa el pecho de la Virgen.Consiguiendo así afianzar su condición intelectual y adquirir más importancia en esa época como escultor. Ya que tanto él como otros escultores no eran tan valorados como los pintores o arquitectos.

Ataque a la obra:
El 21 de mayo de 1972, la escultura sufrió un atentado por parte de un geólogo  australiano  que golpeó en pocos segundos quince veces el rostro y uno de los brazos de la Virgen con un martillo mientras gritaba “Yo soy Jesucristo, resucitado de entre los muertos ” . Rápidamente fue detenido pero la estatua sufrió varios daños en la figura de la Virgen puesto que el martilleo había quitado 50 fragmentos rompiendo su brazo derecho y el codo, también su nariz estaba prácticamente destruida, igual que los párpados.

En la reconstrucción, que se inició inmediatamente a la destrucción, se intentó en la mayor medida la reutilización de los fragmentos originales así como una pasta hecha de pegamento y polvo de mármol. Gracias a la existencia de numerosos modelos fue posible reconstruir el trabajo con fidelidad, sin alteraciones.

El autor del atentado era un enfermo mental y se mantuvo en un manicomio italiano durante un año y luego regresó a Australia. A partir de este hecho la Piedad se encuentra protegida por una pared de vidrio especial a prueba de balas.

Podemos destacar otras Piedades
Como por ejemplo la Piedad de Palestrina, La Piedad de Florencia o la Piedad de Milán en la que Miguel Ángel estuvo trabajando hasta seis días antes de su muerte.


Para concluir podríamos decir que estamos ante un icono de la religión católica y que esta obra no ha dejado a nadie indiferente. Se podría decir que la Piedad esconde muchos secretos pero quizás el mejor guardado es cómo consigue mantener todo su misterio, encanto y belleza con el paso de los siglos.